Volkswagen Caribe GT 1983, un modelo muy especial

Todos sabemos que el Volkswagen Golf, en casi todas sus variantes ha tenido múltiples ediciones especiales y casi todas ellas son muy conocidas, con excepción quizá, de este Volkswagen Caribe GT 1983, propiedad de Federico Leal, a quien tuvimos oportunidad de conocer durante la gira fotográfica celebrada en Atlixco, Puebla, hace ya algunos meses.

Durante la entrevista, Federico nos platicó que el modelo que tienen frente a sus ojos es un Volkswagen Caribe GT 1983 y se le conoce como “prototipo” porque es uno de los modelos que se fabricaron para hacer las pruebas en la Planta de Volkswagen en Puebla.

Muchos accesorios importados de Alemania

El auto cuenta, como podemos ver, con el tradicional color de pintura plata para la carrocería y que, durante la restauración, fue necesaria importar algunas piezas directamente de Alemania.

“Otras piezas las pude conseguir aquí en Puebla”, comenta Federico. “Gracias al poco de mi amigo Jacobo del club GTi, quien me apoyó durante todo el proceso de restauración del auto”, puntualizó.

“Hablando específicamente de algunas piezas, el pomo de la palanca de velocidades (que es la pelota de golf), la mandé traer de Alemania, pero otros accesorios propios del Caribe GT 1983, como el volante, ese sí lo pude conseguir en México”.

Desde Alemania también llegó la parrilla, el spoiler, las defensas e incluso el tapón de gasolina.

Abriendo las puertas de este Volkswagen Caribe GT 1983, lo primero de apreciamos es el juego de asientos que fueron completamente tapizados en Puebla.

“El medallón posterior fue una de las partes más difíciles de conseguir”, comentó Federico. “Pero lo logré gracias al apoyo de Jacobo.

El motor del Volkswagen Caribe GT

Al abrir el cofre descubrimos un motor que, de acuerdo con Federico fue modificado para hacerlo dos litros con caja de cinco velocidades.

“Mi idea principal era modificar mi auto al estilo alemán, porque ya hay muchos Caribes GT o normales, pero yo lo quise hacer diferente, porque el modelo alemán siempre me gustó.

Finalmente, Federico nos platicó que él es vochero de corazón y que durante mucho tiempo militó en las filas del club Talavera Wagen pero que a raíz de la pandemia se separaron un poco.

“Pero seguimos siendo muy buenos amigos. Aquí en Puebla todos nos conocemos y nos llevamos muy bien”, finalizó.

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